Todo lo que necesitas saber sobre el ácido glicólico
Regenera la piel, combate el envejecimiento, reduce los poros, … El ácido glicólico tiene muchos beneficios y usos. ¿Quieres descubrir más? Pues, aquí te cuento todo lo que necesitas saber sobre este activo.
El ácido glicólico es un alfahidroxiácido (AHA) que se encuentra en la leche, la caña de azúcar y algunas frutas como la uva o la remolacha.
Gracias a su reducido tamaño, penetra más profundamente a través de la dermis. Esto tiene una ventaja, pero también algún que otro inconveniente.
Al llegar hasta las capas más profundas, proporciona una mayor eficacia. El problema es que esto también puede causar irritación, así que en caso de que tengas la piel sensible, tienes que ir con algo de cuidado.
En este post, te cuento todo lo que necesitas saber sobre el ácido glicólico y lo que este ácido puede hacer por tu piel. No sólo descubrirás sus beneficios, sino también cómo puedes usarlo.
Ácido Glicólico: Beneficios
Exfolia la piel
El ácido glicólico exfolia la piel. Esto evita que los poros se obstruyan y así los ingredientes activos de los cosméticos penetran mejor a través de la dermis. Además, exfolia mientras hidrata, es decir, no la reseca.
Reduce las manchas
Otro de los beneficios derivados de su acción exfoliante es la reducción de las manchas oscuras, en especial, las provocadas por el sol o por los cambios hormonales que se producen durante el embarazo.
Favorece la renovación de la piel
Este ácido también ayuda a renovar la tez. Al eliminar las células muertas, mantiene la piel más suave y sana. Además de reducir las manchas, también juega un papel muy importante en la lucha contra el acné ya que evita la aparición de granos y espinillas y disminuye la producción de sebo.
Combate los signos del envejecimiento
Es uno de sus beneficios más conocidos. Este alfahidroxiácido estimula los fibroblastos aumentando la producción de colágeno y elastina. Esto previene la aparición de las arrugas y las líneas de expresión, reafirma y mejora la textura y el tono.
También contiene antioxidantes como vitaminas C, B3 y B5 y omega 3 que neutralizan la acción de los radicales libres, principales causantes del envejecimiento prematuro de la epidermis.
Aporta hidratación y luminosidad
Que sea un activo exfoliante no quiere decir que no hidrate. De hecho, esta es una de las grandes ventajas de esta ingrediente. No sólo te proporciona una limpieza profunda que desobstruye los poros, sino que hidrata en profundidad y mejora los niveles de humedad. También aporta más luminosidad.
Reduce las estrías
También ayuda a reducir las estrías, gracias a sus propiedades regenerantes; y al estimular la producción de colágeno y elastina, mantiene la firmeza y la elasticidad, evitando que las fibras se rompan y aparezcan nuevas.
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¿Es fotosensible?
Aunque los alfahidroxiácidos no son fotosensibles ni fotosensibilizantes, te recomendamos que uses protección solar muy alta (SPF 50+).
Este ácido elimina las células de la epidermis dejándola más desprotegida y vulnerable ante los rayos del sol que pueden provocar su envejecimiento prematuro y la aparición de manchas.
Es por eso que también es mejor que lo apliques por la noche, a no ser que en las instrucciones de uso del producto se especifique que también se puede usar por la mañana.
¿Para qué tipo de piel está indicado?
Aunque es apto para todo tipo de piel, está especialmente indicado en aquellos casos en los que se quiere mejorar la textura cutánea ya sea por un problema de acné o para reducir el aspecto de las arrugas y las líneas de expresión y recuperar la luminosidad.
Eso sí, en el caso de la piel sensible hay que usarlo con mucho cuidado para evitar que se irrite. Por eso, antes de aplicarlo, te recomendamos que lo diluyas en un poco de agua; o, si lo prefieres, humedece un disco de algodón y después impregna también con la solución de ácido glicólico.
¿Qué concentración elegir?
Esto depende del estado de tu cutis y el problema que quieras tratar. Si tienes la piel sensible, procura escoger una crema que no tenga una concentración muy alta para evitar la irritación, es decir, inferior a un 10%.
Para el resto, se puede usar una mayor concentración, entre un 15% y un 20%; y si tu problema es el acné o las arrugas, entonces incluso puedes usar un 50% y un 70% para estimular la renovación celular.
Usos del ácido glicólico
Peeling químico
El peeling con ácido glicólico es un tratamiento que se suele aplicar en rostro, cuello, escote y manos. Se suele hacer en centros de estética, pero también existen productos con lo que puedes conseguir un efecto similar en casa.
Esta técnica ayuda a reducir las cicatrices y las marcas de acné, atenúa las arrugas y las líneas de expresión y elimina las células muertas mejorando la absorción del resto de productos de tratamiento.
Y no sólo eso. Renueva la piel, hidrata intensamente, reduce el tamaño de los poros, suaviza e ilumina.
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Cremas
Es, sin duda, uno de los usos más conocidos. Hoy en día, son muchas las cremas que contienen ácido glicólico en su fórmula. De hecho, son uno de los mejores aliados para despertar cada mañana con una tez más radiante y renovada.
Estos tratamientos también pueden ir acompañados de otros ácidos como lactobiónico o lipo-hidroxi (LHA), vitamina C o aloe vera. Además, cuanto menor sea el tamaño del glicólico, más penetrará.
Tónico
También puedes usar el ácido glicólico en tónico. Este producto es el complemento ideal de la limpieza facial.
¿Por qué? Pues, muy sencillo. El limpiador desequilibra el pH cutáneo y el tónico lo reajusta. También prepara la piel para recibir los activos del resto de las cremas y los tratamientos cosméticos que se aplican a continuación.
Además, el tónico con ácido glicólico va más allá de la hidratación y la tonificación: realiza una suave exfoliación que deja la piel más suave, luminosa, uniforme y libre de imperfecciones.
Ahora que ya sabes todo lo que el ácido glicólico puede hacer por tu piel y cómo usarlo, es el momento de que elijas el producto más adecuado para comenzar a disfrutar de todos sus beneficios.
